El término gardar es una palabra de uso anticuado que se refiere a la acción de guardar, es decir, proteger o conservar algo.
Aunque hoy en día se encuentra en desuso, su significado original evoca la idea de resguardar objetos valiosos.
Además, en un contexto más específico, gardar también puede implicar el acto de cambiar una alhaja por otra, sugiriendo un intercambio de bienes preciosos.