La palabra gargarita tiene dos acepciones principales.
En su primera acepción, se refiere a la forma diminutiva de gárgara, que implica el acto de hacer gárgaras, generalmente para aliviar la garganta.
En un contexto más coloquial y específico de Chile, "hacer una gargarita" significa beber aguardiente en ayunas, una práctica que refleja costumbres locales y tradiciones culturales.