El término garitear se refiere a la acción de frequentar garitos, que son lugares donde se realizan juegos de azar de manera informal o clandestina.
Este verbo evoca una actividad asociada a la búsqueda de entretenimiento y, a menudo, de ganancias rápidas, aunque también puede implicar riesgos y consecuencias legales.
Así, garitear se convierte en un reflejo de la cultura del juego en ciertos contextos sociales.