Los genes son las unidades de información genética presentes en el ADN de los seres vivos.
Cada gen contiene instrucciones para la creación de proteínas específicas o para regular la actividad de otros genes.
Son responsables de transmitir las características hereditarias de una generación a otra, y son fundamentales en el desarrollo y funcionamiento de los organismos.
Las mutaciones genéticas, cambios en la secuencia de ADN de los genes, pueden generar variaciones en las características de un ser vivo, contribuyendo así a la diversidad biológica y a la evolución de las especies.
Los genes son las unidades de información genética que se encuentran en el ADN de los organismos vivos. Cada gen contiene instrucciones para la síntesis de una proteína específica o para regular la actividad de otros genes. Los genes son responsables de transmitir las características hereditarias de una generación a la siguiente, y juegan un papel fundamental en el desarrollo y funcionamiento de los seres vivos.
Los genes pueden sufrir mutaciones, es decir, cambios en su secuencia de ADN, lo que puede dar lugar a variaciones en las características de un organismo. Estas variaciones genéticas son la base de la diversidad biológica y contribuyen a la evolución de las especies.
El estudio de los genes y su función es fundamental en disciplinas como la genética, la biología molecular y la medicina, ya que permite comprender mejor los procesos biológicos, identificar enfermedades genéticas y desarrollar tratamientos más precisos y personalizados.