El término geno proviene del ámbito de la genealogía y se refiere a un linaje o prosapia, es decir, a la ascendencia o a la herencia familiar de una persona.
Aunque su uso es considerado anticuado y actualmente se encuentra en desuso, su significado evoca la importancia de las raíces y la historia familiar en la identidad de los individuos.
Este concepto resalta cómo el pasado influye en el presente.