La gibosidad se refiere a una protuberancia que tiene la forma de una giba.
Este término puede aplicarse en diversos contextos, como en la descripción de ciertas condiciones físicas o en la observación de características en objetos.
La presencia de una gibosidad puede ser tanto natural como resultado de alguna alteración, y su estudio puede ofrecer información valiosa sobre la naturaleza del objeto o ser vivo en cuestión.