Girola es un término utilizado en arquitectura para referirse a la nave que rodea el ábside principal de una iglesia.
También se le conoce como deambulatorio, ya que permite a los visitantes transitar alrededor del altar mayor.
Esta característica arquitectónica, presente tanto en el estilo románico como en el gótico, facilita la circulación de personas para que puedan apreciar las obras de arte ubicadas en esa área del edificio.
f. Arq. La girola es la nave o grupo de naves que rodea el ábside en la arquitectura románica y gótica. Por extensión, se emplea también para nombrar la misma nave en catedrales o iglesias de cualquier estilo.
Es básicamente el espacio que rodea el altar principal o altar mayor de las iglesias, por donde pueden transitar o deambular los visitantes, por eso es llamado también deambulatorio.
Fue una típica características de la arquitectura románica y luego en la gótica, ideada para que los visitantes puedan recorrer fluidamente esa parte del edificio y así contemplar las obras de arte que allí se colocan.
En la arquitectura románica y gótica, la girola solía ser un espacio estrecho y semicircular que rodeaba el ábside, con pasillos y capillas radiales dispuestas alrededor.
Esta disposición permitía un flujo continuo de personas alrededor del altar mayor, que era el punto focal de la iglesia. Además de ofrecer una ruta para los visitantes, la girola también servía como espacio de almacenamiento para objetos litúrgicos y como área para la devoción privada.
El término "girola" también se utiliza comúnmente para describir el deambulatorio en las catedrales e iglesias de cualquier estilo, independientemente de si tienen una estructura circular o no.
El deambulatorio es la zona de la iglesia que rodea el altar principal y permite que los fieles se muevan alrededor del mismo para acceder a las diferentes capillas laterales y observar las obras de arte o reliquias que se encuentren allí. Es un espacio diseñado para fomentar la contemplación y la devoción, al tiempo que permite la circulación fluida de los visitantes.
En el caso de la Basílica de Santa María de Guadalupe en México, se ha implementado una versión moderna de la girola. Los fieles pueden utilizar una cinta transportadora automática para observar el famoso cuadro de la virgen que se encuentra detrás del altar.
Este enfoque innovador permite que un gran número de personas tenga la oportunidad de ver y venerar la imagen sagrada, lo cual es especialmente importante en un lugar tan visitado por peregrinos y turistas.
Nave principal, presbiterio y girola de la catedral de Bayona. CC
Etimología u origen de la palabra girola: proviene del francés girolle, y éste del latín gyrare que significa girar, porque es la zona donde se gira al recorrer una iglesia.