El término grajear se refiere a la acción de graznar, que es el sonido característico que emiten algunas aves, especialmente los cuervos y las grajas.
Este verbo describe el acto de producir graznidos, que son ruidos ásperos y repetitivos.
Así, grajear evoca la comunicación vocal de estas aves, un fenómeno natural que puede ser tanto un llamado como una forma de expresar su presencia en el entorno.