"Gran simpático" es un término que hace referencia al sistema nervioso simpático, el cual es responsable de regular diversas funciones del cuerpo de forma automática e involuntaria.
Este sistema, junto con el nervio neumogástrico, forma parte del sistema nervioso autónomo y se encarga de activar respuestas de lucha o huida en situaciones de estrés o peligro.
El sistema simpático juega un papel fundamental en la regulación de la presión arterial, la frecuencia cardíaca, la dilatación de las pupilas y la redistribución del flujo sanguíneo, entre otras funciones vitales para la supervivencia.