El término granate se refiere, en primer lugar, a una piedra fina que se compone de un silicato doble de alúmina y hierro, valorada por su belleza y dureza.
En segundo lugar, se utiliza para describir un color rojo intenso y oscuro, que evoca la tonalidad de esta gema.
Así, el granate no solo es apreciado en joyería, sino que también se asocia con una rica paleta cromática en diversas aplicaciones artísticas.
• « Cuando la miro a contraluz de la piedra preciosa, un millar de chispas relumbran en su interior, formando un caleidoscopio de ardientes colores, desde el rosado hasta el granate. »