El término gregorito tiene dos acepciones principales en el contexto del español.
En primer lugar, se utiliza en el ámbito familiar de Cuba para referirse a una burla o mofa que puede resultar en un chasco pesado o molestia, como en la expresión "dar gregorito".
En segundo lugar, es un diminutivo del nombre Gregorio, que se usa cariñosamente para referirse a personas con ese nombre.