El término hall, de origen inglés, se refiere a un espacio de recibimiento o entrada en un edificio.
Este lugar, a menudo conocido como zaguán, actúa como un punto de transición entre el exterior y el interior, ofreciendo una primera impresión del ambiente que se encuentra más allá.
Su diseño y función pueden variar, pero siempre cumple un papel importante en la organización y estética de los espacios.