El término happening proviene del inglés y se refiere a un acontecimiento artístico que se caracteriza por su naturaleza improvisada.
En este tipo de espectáculo, el público no solo es espectador, sino que también participa activamente en la experiencia.
Los happenings buscan romper con las convenciones tradicionales del arte, creando un ambiente interactivo y dinámico que invita a la reflexión y la expresión colectiva.