Un hectógrafo es un dispositivo que permite reproducir múltiples copias de un texto o dibujo mediante una lámina de gelatina hidrofílica.
Esta lámina absorbe tintas a base de agua y al presionar un papel sobre ella, se transfiere la tinta del patrón original.
Aunque en el pasado fue muy utilizado, en la actualidad ha perdido relevancia frente a las técnicas más rápidas como la impresión por inyección de tinta o láser.
m. Aparato de impresión para sacar multitud de copias de un escrito o dibujo. También llamado copiador de gelatina.
Haciendo uso de una lámina de gelatina hidrofílica, es posible replicar copias a partir de un patrón maestro. Esta lámina tiene la capacidad de absorber tintas a base de agua. Al presionar un papel sobre la lámina, la tinta que fue copiada previamente desde el patrón original se transfiere.
En la actualidad, el uso de la tecnología del hectógrafo ha disminuido debido a su lenta operación en comparación con las modernas técnicas de impresión por inyección de tinta o láser.
Sin embargo, todavía se utiliza en la transferencia de tatuajes y en el mundo del arte, en una técnica de impresión de alta calidad llamada Fototipias (collotype en inglés).
Esta técnica utiliza el mismo principio de la gelatina como soporte para la tinta, pero también permite la transferencia del patrón original a través de una placa fotosensible o mediante pintado directo.
Una de las ventajas de este método es que se pueden utilizar múltiples colores y se obtienen variaciones reales de valor y saturación en lugar de puntos de diferentes tamaños, como ocurre con las técnicas de impresión que utilizan semitonos (halftone).
Sin embargo, es importante tener en cuenta que esto depende del patrón original utilizado, ya que si fue impreso mediante una impresora de inyección de tinta convencional, se notarán los puntos.
Etimología u origen de la palabra hectógrafo: (De hecto, y el gr. escribir.)