El término heterónomo se refiere a algo o alguien que está bajo la influencia o control de un poder externo, lo que limita su capacidad de actuar de manera independiente.
En este sentido, una persona heterónoma no puede desarrollar plenamente su propia naturaleza, ya que sus decisiones y acciones están condicionadas por factores ajenos.
Este concepto se utiliza en diversos contextos, como la filosofía y la ética, para explorar la autonomía y la libertad individual.