El término hijo de leche se refiere a cualquier persona que ha sido alimentada por una nodriza, es decir, una mujer que amamanta a un niño que no es su propio hijo.
Esta expresión resalta la relación especial entre el niño y la mujer que le proporciona nutrición y cuidado, aunque no exista un vínculo biológico directo.
La figura de la nodriza ha sido importante en diversas culturas, simbolizando el amor y la dedicación en el cuidado infantil.