La historia de la pesca de la ballena se remonta a más de mil años, cuando se comenzó a cazar a estos majestuosos mamíferos por su carne y aceite.
A partir de 1550, esta actividad se transformó en una industria que atrajo a países como Inglaterra, Rusia y Noruega, quienes exploraron las ricas aguas del norte de Europa.
En Estados Unidos, la caza costera comenzó en el siglo XVII, evolucionando hacia la pesca de altura, alcanzando su apogeo en 1846 con 736 barcos en operación.
historia: la pesca de la ballena
La persecución y captura de las ballenas para ser utilizadas como alimento, por su aceite o para otros usos humanos se practica por lo menos desde hace 1000 años. Como industria se cree que empezó alrededor de 1550. Los ingleses, rusos, daneses, noruegos y holandeses empezaron a cazarlas antes o poco después de 1600, época en que se descubrió la gran abundancia de ballenas que poblaban las aguas del norte y noroeste de Europa.
En los Estados Unidos la caza costera se inició a principios del siglo xvii, a la altura del Cabo Cod y Long Island. La desaparición de las ballenas de las áreas costeras obligó a la pesca de altura y los barcos balleneros recorrieron el mar desde las Bahamas hasta el Océano Ártico. La caza de la ballena alcanzó en los Estados Unidos su punto máximo en 1846, en que 736 barcos, con base en puertos estadounidenses, operaban en el Japón, Nueva Zelanda o los mares del Sur. Hoy se persigue a la ballena en barcos especiales, muy rápidos y maniobreros, que, además, sirven de factorías flotantes. Un cañón montado a proa dispara un arpón de lengüetas retráctiles y cabeza explosiva, que, al estallar dentro del cuerpo del animal, provoca su muerte instantánea. Para evitar la pérdida del
botín por hundimiento y a fin de que el barco pueda continuar la caza en las aguas circundantes se remolca el animal al costado del barco, se le inyecta aire a presión para mantenerlo a flote y se marca la presa con una boya o banderola que identifica al barco propietario. La caza continúa hasta que el grupo es dispersado o exterminado. Véase Ambar gris; Aceite de ballena.
Como el número ilimitado de capturas amenazaba con exterminar la especie, la Sociedad de Naciones puso en vigor (1931) una convención limitando el número de capturas anuales. En 1949, la Comisión Internacional para la pesca de la ballena (1948) celebró su primera reunión anual en Londres para estudiar los posibles cambios a introducir en las regulaciones internacionales que regían en aquellas fechas. La comisión urgió la necesidad vital de incrementar las investigaciones científicas sobre las costumbres, movimientos, etc., de las ballenas.
Formada por 14 países en principio, tiene ahora alrededor de 84 miembros y ha optado más por en enfoque de la conservación de la especie. Desafortunadamente diferentes puntos de vista entre los países han causado impedimentos en el establecimiento de diferentes iniciativas como el santuario ballenero del Océano Índico y del Pacífico sur. Tres países miembros poseen industria ballenera (Noruega, Japón e Islandia) que continúan con las matanzas a gran escala de ballenas, que se basan en programas de caza científica.