El horizonte racional es un concepto que se utiliza en geografía y astronomía para comprender los fenómenos celestes desde la Tierra.
A diferencia del horizonte sensible, que es visible desde la posición del observador debido a la curvatura terrestre, el horizonte racional es una construcción teórica que extiende este límite visual hacia el espacio en todas direcciones.
Se trata de un círculo máximo en la esfera celeste, paralelo al horizonte sensible, que permite estudiar y analizar los eventos astronómicos desde una perspectiva terrestre más amplia y abstracta.
El concepto de horizonte racional se inscribe dentro del ámbito de la geografía y la astronomía, sirviendo como un instrumento teórico para la comprensión y estudio de los fenómenos celestes desde una perspectiva terrestre.
A diferencia del horizonte sensible, que es aquel que el observador puede percibir directamente desde su posición debido a la curvatura de la Tierra, el horizonte racional es una construcción teórica que extiende este límite visual hasta un plano imaginario que se proyecta en todas direcciones hacia el espacio.
Este concepto permite a los astrónomos y geógrafos establecer un marco de referencia fijo para la observación y medición de los cuerpos celestes, independientemente de las limitaciones visuales impuestas por el relieve terrestre o las condiciones atmosféricas.
Al considerar el horizonte racional como un círculo máximo, se asume que este divide a la esfera celeste en dos hemisferios: visible e invisible, facilitando así la catalogación y estudio de los astros según su posición relativa a este plano.
Además, el horizonte racional juega un papel crucial en la navegación y orientación, ya que proporciona una base para calcular la altura angular de los astros sobre el horizonte real.
Este cálculo es esencial para determinar la posición geográfica del observador sobre la superficie terrestre, especialmente en el mar, donde los puntos de referencia terrestres son inexistentes.