El término hostaje se refiere a una persona que es tomada como rehén, es decir, alguien que queda en poder del enemigo como garantía del cumplimiento de un acuerdo.
Aunque esta acepción es considerada antigua y actualmente está en desuso, su uso en plural sigue siendo relevante en contextos históricos o literarios.
La figura del hostaje simboliza la confianza y el riesgo en las negociaciones entre partes en conflicto.
m. ant. Rehén. [|| m. Persona de estimación que queda en poder del enemigo como prenda o garantía del cumplimiento de lo convenido o tratado. Ú.m. en pl. ver: rehén]
♦ Acepción anticuada.
Etimología u origen de la palabra hostaje: (prov. ostatge, y éste de oste, del latín hospes, -itis, huésped.)