El término humazo se refiere a un tipo de humo que puede ser denso y espeso, como el que se genera al quemar materiales como lana o papel.
Este humo también se utiliza en remedios caseros, aplicándose a las narices o la boca.
Además, en contextos más específicos, se emplea para crear un humo sofocante en buques con el fin de eliminar ratas o para ahuyentar alimañas de sus madrigueras.
En un sentido figurado, "dar humazo a uno" implica hacer que alguien se retire de un lugar donde resulta incómodo.