La Argentina es un país caracterizado por su rica diversidad cultural, donde el castellano se erige como la lengua oficial, aunque coexiste con idiomas indígenas y otras lenguas traídas por inmigrantes.
En el ámbito de la religión, la mayoría de la población se identifica como católica, reflejando la herencia colonial, aunque también hay presencia de comunidades protestantes y judías.
La educación en Argentina se nutre de esta pluralidad, promoviendo un diálogo entre tradiciones y modernidad.
idioma, religión y educación de la Argentina
Aunque algunas tribus indígenas hablan sus idiomas vernáculos, conocen también el castellano, que es la lengua oficial, a la que han aportado frases, matices y modismos, si bien, como ya advirtió el insigne filósofo argentino doctor Herrera Mayor, «el indigenismo no fue nunca óbice al dominio castellanizante». Se han publicado decretos en favor de la pureza de la lengua castellana. Por la elevada proporción de extranjeros que residen en el país se hablan también otras lenguas: italiano sobre todo y, en mucha menor proporción, inglés, francés, alemán y portugués.
Como herencia de los colonizadores españoles, Argentina es un país netamente católico, ya que el 94 % de sus habitantes profesa esta religión. La presencia de anglosajones da cifras de alguna consideración al protestantismo, mientras los judíos son también numerosos. Existe un Concordato (1949) con la Santa Sede que rige, entre otras cosas, la designación de arzobispos y obispos por Su Santidad, a propuesta del Presidente argentino, quien elige uno de cada terna aprobada por el Senado. Eclesiásticamente está dividida Argentina en 9 archidiócesis, 35 diócesis y varias prefecturas apostólicas. Las sedes metropolitanas son Buenos Aires, Bahía Blanca, Córdoba, La Plata, Paraná, Salta, San Juan de Cuyo, Santa Fe y Tucumán.
El progreso obtenido por la instrucción y la cultura en Argentina es verdaderamente gigantesco y ha colocado al país a la cabeza del continente sudamericano. El analfabetismo era un mal endémico hasta el extremo de que, según él censo de 1869, el 78,2 % de la población no sabía leer ni escribir; en 1895 todavía representaba el 54 % pese a los esfuerzos realizados por los gobiernos nacionales y provinciales en la fundación de escuelas. En 1914 el analfabetismo había descendido al 35 %, en 1943 al 15 % y en 1947 —para mayores de 14 años—al 3,9 %. Actualmente la tasa de analfabetismo se ubica en el 2%.
Hay excelentes museos, bibliotecas, observatorios meteorológicos y sísmicos, etc. Entre sus museos descuellan el Nacional de Bellas Artes, el Histórico Nacional, el de Ciencias Naturales, el de Arte Colonial, el Decorativo, el Naval, el de Armas, el Nacional del Teatro, el del Cabildo, el Municipal Saavedra, el Filatélico, el Postal, etc. Entre los periódicos son famosos La Prensa y La Nación, ambos de Buenos Aires que, fundados en 1869 y 1870 respectivamente, como así también Clarín, son los que ejercen mayor influencia orientadora. La actividad editorial es muy intensa, la mayor de Hispanoamérica, con profusión de publicaciones de carácter científico, histórico, literario, artístico, pedagógico, deportivo, etc., dedicadas a todo lector americano e incluso al español.
