La impavidez es la cualidad de ser impávido, es decir, de mantener la calma y la serenidad ante situaciones difíciles o amenazantes.
Esta característica se manifiesta en personas que, a pesar de enfrentar retos o peligros, no muestran miedo ni alteración.
La impavidez se asocia con la fortaleza emocional y la capacidad de actuar con determinación, lo que la convierte en un rasgo admirable en momentos de crisis.