La expresión in extremis, de origen latino, se utiliza para referirse a situaciones que ocurren en los últimos instantes de la existencia o en momentos críticos.
En el ámbito legal, se relaciona con el matrimonio in extremis, que describe la unión de dos personas en circunstancias urgentes o límites, a menudo en el contexto de una enfermedad grave o una inminente separación.
Esta frase evoca la intensidad y la urgencia de tales momentos decisivos.