El término infuscar proviene de un uso antiguo y se refiere a la acción de obscurecer o ofuscar algo.
Aunque hoy en día es considerado una acepción anticuada y se encuentra en desuso, su significado evoca la idea de cubrir o nublar la claridad de un concepto o situación.
Esta palabra nos recuerda cómo el lenguaje evoluciona y cómo ciertos términos pueden caer en el olvido, dejando solo un eco de su existencia.