La intersístole es un término utilizado en el ámbito de la fisiología que se refiere al espacio de tiempo que transcurre entre el final de la sístole auricular y el inicio de la sístole ventricular.
Este intervalo es crucial para el correcto funcionamiento del corazón, ya que permite que las aurículas y ventrículos se preparen adecuadamente para el siguiente ciclo de contracción, asegurando así una eficiente circulación sanguínea.