Se aplica a situaciones, condiciones o circunstancias que resultan insoportables para las personas, ya sea por su carácter físico, emocional, moral o ético.
La intolerabilidad puede estar relacionada con la injusticia, la crueldad, la opresión, la discriminación o cualquier otra situación que atente contra la dignidad y el bienestar de las personas.
En términos sociales y políticos, la intolerabilidad puede referirse a la falta de tolerancia y respeto hacia las diferencias individuales o colectivas, lo que puede desencadenar conflictos, violencia o inestabilidad.
En el ámbito personal, la intolerabilidad puede manifestarse como un estado de malestar extremo que lleva a la persona a buscar soluciones o alternativas para mitigar su situación.
Ejemplos de uso: "La intolerabilidad de la discriminación racial ha sido motivo de protestas en todo el mundo"
"La intolerabilidad de la situación económica llevó a la gente a la calle en busca de soluciones"
"La intolerabilidad de la opresión política generó un clima de inestabilidad en el país"
"No podemos permitir la intolerabilidad de la violencia de género en nuestra sociedad".
Etimología u origen de la palabra intolerabilidad: proviene del latín intolerabilitas, -átis.