Las inundaciones históricas memorables son eventos catastróficos que han dejado una huella profunda en la memoria colectiva de naciones como China, Holanda e India.
Estos desbordamientos han causado la pérdida de miles de vidas, superando a menudo las 50,000 almas, y reflejan la devastación que puede resultar de la falta de atención a la regulación de aguas.
En particular, el río Amarillo en China ha sido escenario de tragedias, donde entre 1887 y 1947, más de 200,000 personas perdieron la vida.
inundaciones históricas memorables
China, Holanda y la India han sufrido los efectos de las avenidas más devastadoras que registra la historia, con relaciones de bajas superiores a 50000 almas, trágico balance normal de las inundaciones mayores. La Holanda moderna ha quedado excluida de tan fatídica lista merced a su sistema de diques de contención; quedan los otros dos países citados como escenario de algunas de las más desastrosas inundaciones de nuestra época, en parte debidas a la poca atención prestada a la regulación de las aguas.
Entre 1887 y 1947, por ejemplo, más de 200000 personas perecieron a causa de los desbordamientos de los ríos en China. Los fértiles valles de los ríos Amarillo y Yang-tse Kiang han sido los más castigados a causa de la densidad de su población y la imposibilidad de predecir las crecidas y cambios de curso de esos ríos. En 1851 se desbordó el río Amarillo, que torció su curso para desembocar en el Golfo de Pechili y produjo la inundación consiguiente y la pérdida de millares de vidas. En 1938 volvió el temible río a rectificar su lecho para desaguar en el Mar Amarillo a 480 km de su desembocadura original. En esta coyuntura quedaron sin hogar 700000 personas. También el Yang-tse Kiang, de manera igualmente imprevisible y fatídica, formó de súbito en 1911 un lago de 128 km de largo por 56 de ancho, en cuya inundación perecieron más de 100000 personas y quedaron sin hogar otras 3 750000. Véase Hoang-Ho; Yang-tse Kiang.
Entre 1170 y 1570 varias inundaciones gigantescas anegaron Holanda; en 1228, por ejemplo, murieron 100000 personas y no menos en 1521. Al derrumbarse los diques, en 1530, murieron 400000.
Las inundaciones han causado pérdidas enormes en vidas, humanas en la India, cuya densidad de población, como en el caso de China, explica el número exorbitante de muertes.
También en otros países se han producido avenidas con pérdidas humanas; así en Noruega (1219) se ahogaron 36000; en España (1617) murieron 15000; en Polonia y Silesia (1813) perdieron la vida 10000. Tampoco Cuba, Japón y las Islas Filipinas se han librado de inundaciones devastadoras. En Norteamérica no han ocurrido pérdidas humanas comparables a las de China, la India u Holanda. El número de bajas más considerable originado por una sola catástrofe tuvo lugar en Galveston (Texas), donde murieron 6000 personas a consecuencia de la ola de marea subsiguiente a un huracán.
El huracán Katrina en 2004, mató por inundaciones mató a más de 1800 personas en la ciudad de New Orleans, EEUU.