La palabra jeda se refiere a una vaca que ha dado a luz recientemente y que está en el proceso de crianza.
Este término es especialmente utilizado en la región de Cantabria, donde se reconoce la importancia de las vacas en la agricultura y la ganadería.
La jeda simboliza no solo la continuidad de la vida en el campo, sino también el cuidado y la atención que requieren los animales en esta etapa crucial.