La naturaleza divina y humana de Jesucristo es un concepto central en la teología cristiana. Según la doctrina cristiana, Jesucristo es considerado como la encarnación de Dios, es decir, Dios hecho hombre.
En cuanto a los versículos bíblicos que nos indican esta dualidad en la naturaleza de Jesucristo, podemos encontrar varios pasajes en el Nuevo Testamento:
1. Juan 1:1-3: "En el principio ya existía el Verbo, y el Verbo estaba con Dios, y el Verbo era Dios. Él estaba en el principio con Dios. Todas las cosas fueron hechas por medio de él, y sin él no se hizo nada de lo que ha sido hecho." Este pasaje nos muestra que Jesucristo, el Verbo, existía desde el principio y era Dios.
2. Juan 1:14: "Y aquel Verbo se hizo carne, y habitó entre nosotros (y vimos su gloria, gloria como del unigénito del Padre), lleno de gracia y de verdad." Aquí se nos indica que el Verbo, es decir, Jesucristo, se hizo carne y habitó entre los seres humanos.
3. Filipenses 2:6-8: "El cual, aunque existía en forma de Dios, no consideró el ser igual a Dios como algo a qué aferrarse, sino que se despojó a sí mismo tomando forma de siervo, haciéndose semejante a los hombres. Y hallándose en forma de hombre, se humilló a sí mismo, haciéndose obediente hasta la muerte, y muerte de cruz." Este pasaje nos muestra cómo Jesucristo, siendo Dios, se hizo semejante a los hombres al tomar forma de siervo.
Estos son solo algunos ejemplos de versículos que nos indican la naturaleza divina y humana de Jesucristo. La Biblia está llena de referencias y enseñanzas sobre este tema, por lo que te recomendaría explorar más pasajes para tener una comprensión más completa.
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