La junta arbitral es un tribunal administrativo encargado de resolver disputas relacionadas con defraudaciones.
Su función principal es actuar como mediador y tomar decisiones en casos donde se alegan irregularidades, garantizando así la justicia y la transparencia en los procesos.
Este organismo juega un papel crucial en la protección de los derechos de las partes involucradas, asegurando que se cumplan las normativas establecidas.