La palabra lanterna se refiere a un farol que es fácil de llevar en la mano, caracterizado por tener una cara de vidrio y un asa en el lado opuesto.
Aunque su uso ha caído en desuso y se considera una acepción anticuada, la lanterna evoca imágenes de iluminación portátil, utilizada en tiempos pasados para iluminar caminos y espacios oscuros.
Su diseño práctico la hacía indispensable en diversas situaciones.