El término lastrear proviene de la acción de lastrar, que se refiere a la práctica de añadir peso a una embarcación para mejorar su estabilidad en el agua.
Aunque esta acepción está en desuso, su significado original se relaciona con la idea de proporcionar un soporte o equilibrio.
En contextos más amplios, puede implicar la carga de responsabilidades o dificultades que afectan el desempeño de alguien o algo.