El término latrocinante se refiere a aquel que latrocina, es decir, que comete un robo o un acto de saqueo.
Este concepto evoca la idea de una persona que se dedica a la delincuencia y que actúa con el propósito de obtener bienes ajenos de manera ilegal.
La figura del latrocinante está asociada a comportamientos deshonestos y a la violación de las normas sociales, generando un impacto negativo en la seguridad y la convivencia.