El término lectoral se refiere a una canonjía específica que se otorga a un doctor en teología, quien tiene la responsabilidad de explicar la Escritura.
Esta designación también se aplica al canónigo que recibe dicha canonjía.
En este contexto, "lectoral" implica no solo un cargo eclesiástico, sino también un compromiso con la enseñanza y la interpretación de textos sagrados, destacando su importancia en la vida religiosa.