El término legible hace referencia a la capacidad de un texto o documento para ser leído y comprendido con facilidad.
Un texto legible se caracteriza por su tipografía clara, espaciado adecuado y estructura coherente que facilita la lectura fluida.
La legibilidad es esencial en la comunicación escrita, ya que un texto ilegible puede obstaculizar la transmisión efectiva de información y causar confusiones en el lector.
Por tanto, es crucial garantizar la legibilidad en diversos tipos de documentos, desde cartas y correos electrónicos hasta informes y manuales de instrucciones.
El adjetivo legible se refiere a la claridad y facilidad con la que un texto o documento puede ser leído y comprendido por una persona. Un texto legible es aquel que presenta una tipografía clara, un espaciado adecuado entre líneas y palabras, así como una estructura coherente que facilita la fluidez en la lectura.
La legibilidad es un aspecto fundamental en la comunicación escrita, ya que un texto ilegible puede dificultar la transmisión efectiva de información y generar confusiones en el receptor. Por ello, es importante cuidar la legibilidad en todo tipo de documentos, desde cartas y correos electrónicos hasta informes y manuales de instrucciones.
Ejemplos de uso: "caligrafía legible"; "firma legible".
"la carta se mojó, pero aún es legible".
"La firma en el contrato debe ser legible para evitar malentendidos".
"A pesar de la lluvia, el mensaje en la carta sigue siendo legible y comprensible".
Origen etimológico de legible: proviene de la palabra latina legibĭlis