El término lemán se refiere a un piloto práctico, una figura que, en tiempos pasados, guiaba embarcaciones en aguas específicas.
Aunque esta acepción es considerada anticuada y actualmente se encuentra en desuso, su uso refleja la importancia de contar con expertos en navegación para asegurar la seguridad y eficiencia en el transporte marítimo.
La historia de esta palabra nos conecta con prácticas náuticas de épocas anteriores.