El término lengüicorto o lengüicorta se utiliza en el lenguaje coloquial para describir a una persona que es tímida al hablar o que muestra una actitud reservada en sus interacciones.
Este adjetivo refleja una característica de personalidad que puede manifestarse en situaciones sociales, donde la falta de confianza o la inseguridad pueden dificultar la expresión verbal.
Así, ser lengüicorto implica una tendencia a no abrirse fácilmente en conversaciones.