La lentitud se refiere a la falta de rapidez en los movimientos, lo que puede manifestarse en acciones físicas que se realizan de manera pausada o con poca actividad.
Además, en un sentido más figurado, la lentitud también puede aludir a la torpeza de entendimiento, es decir, a la dificultad para comprender o reaccionar con agilidad ante situaciones.
En ambos casos, la lentitud implica una ausencia de viveza y dinamismo.