La ley de la trampa se refiere a un embuste o engaño que se utiliza para atrapar o manipular a alguien.
Este término implica que hay una intención oculta detrás de una situación aparentemente inofensiva, donde la víctima puede caer en una trampa sin darse cuenta.
Comprender esta expresión es esencial para reconocer las tácticas engañosas en diversas interacciones sociales y evitar ser víctima de ellas.