La palabra llera se refiere a un tipo de terreno caracterizado por la presencia de glera, que es una mezcla de arena y grava.
También puede designar un cascajar, un lugar donde abunda el cascajo, que son piedras pequeñas o fragmentos de roca.
Estas acepciones reflejan la relación de la llera con el entorno natural y su composición geológica, destacando su importancia en la descripción de paisajes y su uso en la agricultura.