La llovizna es un fenómeno meteorológico caracterizado por la caída de pequeñas gotas de agua, generalmente con un diámetro inferior a 0,5 mm, de manera suave y constante.
Este tipo de precipitación se diferencia de la lluvia por su intensidad y tamaño de las gotas.
La llovizna es un componente común en el clima de muchas regiones y contribuye a la humedad del ambiente.
Es considerada un meteoro acuoso que puede tener un impacto leve en las actividades al aire libre.