El término lloviznar se refiere a la acción de caer una ligera y suave llovizna, que es una forma de precipitación en la que las gotas de agua son pequeñas y finas.
Este fenómeno meteorológico suele ser menos intenso que la lluvia, creando una atmósfera fresca y húmeda.
La llovizna puede ser agradable y refrescante, especialmente en días cálidos, y es común en diversas regiones del mundo.