El término lombardear se refiere, en su primera acepción, a la acción de disparar lombardas, que son armas de fuego antiguas, contra un lugar específico.
Este verbo evoca imágenes de batallas y asedios, donde las lombardas eran utilizadas para causar daño o intimidar al enemigo.
Así, lombardear no solo implica el acto físico de disparar, sino también la estrategia y el contexto bélico en el que se desarrolla.