La longanimidad es una cualidad que refleja la grandeza y la constancia de ánimo ante las adversidades.
Se trata de la capacidad de mantener la calma y la fortaleza emocional incluso en los momentos más difíciles.
Esta virtud permite a las personas enfrentar los desafíos con paciencia y resiliencia, mostrando una admirable fortaleza interior que les ayuda a superar obstáculos y a seguir adelante sin rendirse.