La palabra magar es una conjunción antigua que se utilizaba como sinónimo de aunque.
Su uso ha caído en desuso, y hoy en día se considera una acepción arcaica.
A pesar de su rareza en el lenguaje contemporáneo, representa una parte interesante de la evolución del español y refleja cómo ciertas palabras pueden desaparecer con el tiempo, dejando solo vestigios en la memoria cultural.