El término manear tiene diversas acepciones que varían según el contexto y la región.
En su uso más común, se refiere a poner maneas a las bestias, es decir, sujetarlas para su control.
También puede significar manejar en un sentido más amplio.
En México, se utiliza para describir el acto de tropezar o enredarse los pies, mientras que en Chile, puede referirse a maniatarse o embarazarse en un apuro.