El término mar cerrada se refiere a un cuerpo de agua que está parcialmente aislado del océano a través de un canal o estrecho.
Esta característica geográfica influye en su salinidad, temperatura y biodiversidad, creando un ecosistema único.
La conexión limitada con el océano puede afectar las corrientes y la vida marina, haciendo que estos mares sean de gran interés para estudios ambientales y navegación.