El término marcelino y su forma femenina marcelina se relacionan con el mes de marzo, refiriéndose a algo que pertenece o se asocia a este periodo.
Aunque hoy en día su uso es considerado anticuado y se encuentra en desuso, estas palabras evocan una conexión con la naturaleza y el ciclo de las estaciones.
Su significado refleja una época en la que los nombres estaban más ligados a los meses del año.