La masonita es un mineral que se clasifica como un silicato hidratado de aluminio, que contiene además óxido de hierro.
Este material se encuentra en diversas formaciones geológicas y es apreciado en el ámbito de la minería por sus propiedades y aplicaciones.
Su composición química le confiere características únicas que lo hacen relevante en diferentes procesos industriales y en la investigación mineralógica.