La palabra menaza es una forma anticuada y en desuso de referirse a la amenaza, que implica la acción de amenazar.
Esta acepción se encuentra en desuso en el lenguaje actual, pero su significado original se relaciona con la idea de provocar temor o inquietud en alguien mediante la expresión de un posible daño o perjuicio.
Aunque hoy se prefiere el término moderno, menaza nos recuerda la evolución del lenguaje.